Managua-. La Organización Internacional para las Migraciones, OIM entregó kits de asistencia humanitaria a las embajadas de la República de Guatemala, República de Honduras y República de El Salvador en Nicaragua, para contribuir a la asistencia de sus connacionales radicados en el país, ante la pandemia COVID-19.

La OIM está comprometida a garantizar la protección emergente de las personas migrantes, desplazadas y otras poblaciones vulnerables que permanece en el centro de su respuesta COVID-19 a través del apoyo a la continuidad de los mecanismos y respuestas de protección crítica, incluida la transfronteriza, a fin de proporcionar servicios de protección urgentes o derivaciones a los servicios apropiados para quienes más lo necesitan como migrantes varados, poblaciones desplazadas, comunidades afectadas y otras personas en situaciones vulnerables o que necesitan atención y protección específicas, como mujeres y niñas en riesgo o sobrevivientes de violencia de género (VG), niños, personas con discapacidades, niños no acompañados y separados, ancianos, etc.

“Con este esfuerzo en coordinación con las embajadas que nos han solicitado asistencia, la OIM contribuye a garantizar que las poblaciones migrantes -ya sea en situaciones regulares o irregulares- retornados y las personas desplazadas,  sean incluidas en los esfuerzos para mitigar y combatir el impacto de la pandemia  COVID19”, expresó Paola Zepeda,  Jefa de Oficina de OIM Nicaragua.

Irene Cardona, Consejera Consular de la Embajada de la República de Honduras agradeció el apoyo de OIM a Honduras, ya que “con la donación de kits de higiene y alimentación, podemos continuar apoyando a nuestros connacionales en el Nicaragua”.

Las Representaciones Diplomáticas han entregado directamente los kits de asistencia a sus nacionales en situación de vulnerabilidad entre ellos se encuentran: mujeres, hombres, y niñas, niños y adolescentes.

Al 10 de marzo de 2020, al menos 1.820 restricciones de movimiento se habían implementado debido a COVID-19. Entre el 11 de marzo de 2020, cuando la OMS declaró al COVID-19 una pandemia, y el 20 de abril de 2020, el número total de restricciones de movimiento implementadas en todo el mundo aumentó a más de 48,000 (OIM, 2020). El aumento de las restricciones fronterizas también tiene un impacto en la movilidad de los migrantes y el papel de las organizaciones humanitarias.